Bitcoin sigue batiendo récords. Menos de dos semanas después de que la criptomoneda original cruzara la marca de los $80,000 por primera vez, se ha disparado a poco menos de $100,000 y muchos anticipan que podría cruzar esa marca esta semana.
Esta racha sin precedentes, que se ha extendido a los mercados criptográficos más amplios, se produce tras la victoria electoral de Donald Trump y las expectativas generalizadas de que él y un Congreso republicano marcarán el comienzo de una era de regulación favorable para los activos digitales. Desde la noche de las elecciones, la capitalización de mercado de la industria ha crecido más de 1 billón de dólares.
Adam McCarthy, analista de investigación de la firma de datos criptográficos Kaiko, dijo Fortuna que si el interés de los inversores continúa como hasta ahora, espera que Bitcoin supere la marca de los 100.000 dólares antes de fin de año.
«Si ese apetito continúa, si las entradas que hemos visto en los ETF este año continúan, entonces eso debería preparar estructuralmente las cosas para un final de año interesante», dijo McCarthy.
Dice que el hecho de que Bitcoin se convierta en un activo de seis cifras indicará a los comerciantes el reconocimiento de que es una reserva legítima de valor que no va a desaparecer.
«Es simplemente un gran hito», dijo McCarthy. «Es tanto una validación como también es emocionante».
El jueves, Bitcoin alcanzó un nuevo máximo histórico de 98.831 dólares, lo que coincidió con el anuncio del presidente de la Comisión de Bolsa y Valores, Gary Gensler, de que dimitirá de su cargo cuando Trump asuma el cargo el 20 de enero.
Gensler, quien ha sido un ejecutor clave de la agresiva postura anti-criptomoneda de la administración Biden, escribió en X: “Agradezco a @POTUS por confiarme esta increíble responsabilidad. La SEC ha cumplido nuestra misión y ha hecho cumplir la ley sin miedo ni favor”.
La salida de Gensler fue recibida con júbilo generalizado en las redes sociales por figuras de la industria de la criptografía, que ha sido objeto de una ola de acciones coercitivas por parte de la SEC. Esas acciones legales, que incluyeron demandas contra los gigantes de la industria Coinbase y Ripple, ayudaron a impulsar una campaña política bien financiada para elegir legisladores favorables a las criptomonedas.
La carrera de Bitcoin hacia los 100.000 dólares también coincide con la noticia de que el equipo de Trump está considerando la creación de un rol en la Casa Blanca dedicado específicamente a la política de criptomonedas. Si bien no está claro cuál será la capacidad exacta del puesto, los líderes de la industria están presionando para que sirva como línea directa con el presidente, según un informe de Bloomberg News. La posición le daría a la industria una influencia sin precedentes sobre las reglas que la rigen.