El cambio de régimen world wide hacia tasas de interés más altas y menos liquidez que se está produciendo tendrá un fuerte impacto en la inversión empresarial y en la asignación de recursos. Debido a las presiones inflacionarias estructurales, se espera que los bancos centrales tengan menos capacidad de intervenir en la política monetaria para extender las expansiones y acortar las recesiones, lo que impulsará transformaciones significativas en la gestión activa de renta fija.
El ciclo económico está compuesto por cuatro etapas: expansión, pico, contracción y valle. Cada una de ellas se caracteriza por factores como el PIB, las tasas de interés, el empleo y el gasto del consumidor. Durante la fase de expansión, la economía presenta un crecimiento económico, aumento del gasto de los consumidores, aumento de los niveles de empleo y mayor inflación. En cambio, la contracción se determine por la disminución de la actividad económica, la disminución del gasto de los consumidores, el aumento de los niveles de desempleo y la menor inflación.
Los bancos centrales utilizan la política monetaria para influir en el ciclo económico, mediante el regulate de la oferta de dinero y crédito en la economía. Durante una fase expansiva, un banco central puede aumentar las tasas de interés para desacelerar la actividad económica y evitar que la inflación aumente demasiado rápido o se incruste en la economía. Durante la desaceleración del crecimiento, un banco central puede reducir las tasas de interés para alentar el endeudamiento y el gasto para ayudar a impulsar la actividad económica y aumentar la inflación en standard.
La inflación cíclica y estructural son dos tipos de inflación que afectan a la economía. La inflación cíclica se deriva de las fluctuaciones en el ciclo económico y es temporal, por lo que las herramientas de política monetaria, como el ajuste de las tasas de interés, pueden revertirla. La inflación estructural se refiere a la inflación causada por factores a largo plazo que están integrados en la economía, como los desequilibrios de oferta y demanda, la desglobalización, la demografía y la descarbonización. La inflación estructural es persistente y difícil de contrarrestar, y requiere cambios fundamentales en la economía para abordarla.
En los próximos años, se espera que los costos laborales y energéticos impulsen la inflación estructural al alza. El envejecimiento de la población y el descenso de las tasas de natalidad han dado como resultado una disminución de las tasas de participación en la fuerza laboral y mercados laborales más ajustados. La transición a la descarbonización y la demanda de energía en las economías en desarrollo también pueden generar costos de energía más altos.
Los ciclos económicos más cortos y volátiles exigirán que los inversores estén preparados para capturar oportunidades episódicas en áreas sobrevendidas del mercado. La mejor manera de obtener alfa durante un cambio de régimen es aumentar y disminuir proactivamente el riesgo crediticio y de tasa de interés a medida que cambian las condiciones del mercado, rotar rápidamente la exposición al sector, aumentar selectivamente el riesgo para emisores específicos y elegir puntos de inversión baratos dentro de las tendencias a largo plazo.
En conclusión, el cambio de régimen world hacia tasas de interés más altas y menos liquidez impulsará transformaciones significativas en la gestión de renta fija y en la asignación de recursos. Los inversores deben estar preparados para abordar los ciclos económicos más cortos y volátiles y aprovechar las oportunidades episódicas en áreas sobrevendidas del mercado para obtener alfa.
Resumen de Noticias Blockchain – Cambio de régimen, política monetaria y ciclos económicos más cortos
Se espera que el cambio de régimen worldwide hacia tasas de interés más altas y menos liquidez tenga un impacto significativo en la inversión empresarial y la asignación de recursos. Las presiones inflacionarias estructurales podrían limitar la capacidad de los bancos centrales para intervenir en la política monetaria para extender las expansiones y acortar las recesiones. Las interrupciones y dislocaciones relacionadas con ciclos comerciales más volátiles están aumentando las oportunidades para la gestión activa de renta fija, y se espera que surjan más oportunidades a medida que el cambio de régimen se afiance. La inflación cíclica es temporal y se puede revertir con herramientas de política monetaria, mientras que la inflación estructural requiere cambios fundamentales en la economía para abordarse. Se espera que los costos laborales y energéticos impulsen la inflación estructural al alza. El tamaño de la cartera se está convirtiendo en una consideración importante ya que es cada vez más costoso comprar o vender valores en efectivo y, en unique, reposicionar carteras más grandes. Para aprovechar con éxito las oportunidades de inversión crediticia, se requiere una capacidad comprobada para capturar oportunidades episódicas y rotar rápidamente la exposición al sector.