A mediados de 2024, ese tono se había cambiado cuando Von der Leyen buscó un segundo mandato y prometió abordar los problemas que podrían detener el crecimiento de la UE, como un exceso de burocracia.

Europa ya estaba liderando para hacer que la IA sea segura, von der Leyen argumentó: «Ahora debemos centrar nuestros esfuerzos en convertirnos en un líder mundial en la innovación de IA». Ese trabajo fue confiado al nuevo jefe de tecnología de la comisión, Henna Virkkunen de Finlandia.
Es un desafío considerable. Estados Unidos es el hogar de la mayoría de los principales proveedores de modelos de IA, como la serie GPT de OpenAi, Google Gemini y Claude de Anthrope. También aloja a los mayores proveedores de la nube del mundo, Amazon, Microsoft y Google, y los chips de IA, gigante Nvidia.
Las empresas europeas han sido muy lentas incluso para usar la tecnología, con solo el 13 por ciento de ellas adoptadas AI.
Virkkunen, solo dos meses después del trabajo, ha tratado de corregir ese curso.
Para empezar, anunció una inversión de 1.500 millones de euros en siete supercomputadoras optimizadas de AI-AI, la mitad de esa cantidad financiada por la UE. Las supercomputadoras deberían ayudar a las startups europeas de IA con rivales de chatgpt de capacitación.