Los legisladores franceses están debatiendo un impuesto sobre las ganancias de capital no realizadas para las criptomonedas, lo que podría alterar la forma en que se gravan activos como Bitcoin.
La propuesta categorizaría criptomonedas como Bitcoin (BTC) como “propiedad no productiva”, junto con bienes raíces inactivos y artículos de lujo como yates. Esta clasificación los colocaría bajo un propuesto “impuesto a la riqueza improductiva”, reemplazando el actual impuesto a la riqueza inmobiliaria.
La idea, presentada durante el debate del Senado francés sobre el presupuesto de 2025, sugiere gravar los aumentos en el valor de las criptomonedas incluso si los activos no se han vendido. Esto representa una desviación del sistema actual, donde los impuestos sobre las criptomonedas solo se aplican cuando se obtienen ganancias, como cuando se venden activos.
La senadora Sylvie Vermeillet, patrocinadora de la propuesta, argumentó que este cambio alinearía los impuestos a las criptomonedas con otras categorías de riqueza.
El mes pasado, el Consejo de Derecho Fiscal de Dinamarca recomendó proponer un proyecto de ley para gravar las ganancias y pérdidas no realizadas sobre criptoactivos bajo un modelo de tributación de inventarios. El proyecto de ley propuesto tiene como objetivo abordar la tributación injusta de los criptoinversores y simplificar las normas fiscales para los criptoactivos.
Este impuesto no es ley….todavía
El debate del Senado incluyó una votación preliminar sobre la propuesta. En particular, sólo estuvieron presentes los senadores que apoyaban la decisión, lo que significa que la votación aún no refleja una decisión final ni un consenso más amplio. Si la propuesta avanza, necesitaría la aprobación de la Asamblea Nacional francesa antes de convertirse en ley.
Para quienes no están familiarizados con el concepto, las ganancias no realizadas se refieren al aumento de valor de un activo que no se ha vendido. Por ejemplo, si el valor de Bitcoin aumenta después de la compra pero no se vende, el propietario actualmente no debe impuestos sobre ese aumento. El impuesto propuesto cambiaría esto al aplicar gravámenes sobre esa ganancia en papel, incluso si el activo no se convierte en efectivo.
Este debate se produce en medio de una tendencia global de gobiernos que luchan por cómo regular y gravar las criptomonedas.
En los EE. UU., los impuestos a las criptomonedas solo se aplican cuando se venden activos. Algunos países, como Alemania y Portugal, ofrecen exenciones fiscales para tenencias a largo plazo o clasifican los activos digitales de manera más indulgente.