Kathy Hochul promulgó la legislación sobre la minería de criptomonedas con el protocolo Proof-of-Work (PoW). La legislación impondrá una moratoria de dos años a las empresas de criptominería que buscan nuevos permisos para adaptar algunas de las plantas de combustibles fósiles más antiguas y sucias del estado a operaciones de minería digital. También requiere que Nueva York estudie el impacto de la industria en los esfuerzos del estado para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Durante los dos próximos años, únicamente la minería basada 100% en energías renovables estará permitida en Nueva York. Hace cuatro meses, el Senado de Nueva York aprobó un proyecto de ley que apuntaba a regular en el mismo sentido. Se trató de un esfuerzo por abordar algunas de las preocupaciones ambientales en torno a la extracción de criptomonedas.
Días después, el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, se manifestó en contra del proyecto de ley y planteó que pediría a la gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, que vetara la moratoria. Lejos de eso, la mandataria le dio luz verde.
Hochul hizo declaraciones para explicar su aprobación.
“Me aseguraré de que Nueva York siga siendo el centro de la innovación financiera, al mismo tiempo que tomo medidas importantes para priorizar la protección de nuestro medio ambiente”.
Los partidarios de la legislación celebraron su firma. La presentaron como una señal esperanzadora de que la medida de Nueva York marcará la pauta para otros estados que podrían estar considerando regulaciones.
Por su parte, la Cámara de Comercio Digital se mostró decepcionada por la determinación.
“El argumento del estado de que el uso de energía de la industria minera está exponencialmente más allá de otras industrias es descaradamente falso. La Ley de Liderazgo Climático y Protección Comunitaria exige que las emisiones de gases de efecto invernadero de Nueva York se reduzcan en un 85% y alcancen cero emisiones netas en todos los sectores para 2050.”
“Hasta la fecha, ninguna otra industria en el estado ha sido marginada de esta manera por su uso de energía. Este es un precedente peligroso para establecer al determinar quién puede o no usar el poder”.
Más críticas a la ley
Esta determinación en Nueva York se produce meses después de que algunos otros estados adoptaran políticas más amigables hacia la industria. En esos casos, hicieron foco en la oferta de incentivos fiscales con la esperanza de atraer operaciones de criptominería, después de que China tomó medidas enérgicas contra la actividad el año pasado.
Desde algunas compañías, como GEM Mining, apuntan que esta nueva legislación no solo afectará a la minería PoW, sino que también “disuadirá a los nuevos mineros que se basan en energías renovables, ya que no querrán hacer negocios en un entorno hostil hacia la minería y con posibles avances regulatorios más restrictivos”.
Durante meses, Hochul se mantuvo evasiva sobre si apoyaba el proyecto de ley. En su momento afirmó que su oficina estaba revisando la legislación y que estaba sopesando las preocupaciones de que una moratoria podría impedir la actividad económica en la región.
Los grupos nacionales de la industria de las criptomonedas se opusieron fuertemente a la prohibición temporal. Estos sectores se pronuncian preocupados de que otros estados pudieran seguir el ejemplo de Nueva York e imponer moratorias u otras restricciones.
Para los partidarios del proyecto de ley, la legislación no afectará las instalaciones mineras existentes ni detendrá todas las actividades de criptominería en el estado, solo aquellas que buscan permisos para volver a alimentar las plantas de combustibles fósiles, dejando aquellas que se conectan directamente a la red eléctrica o usan energía renovable.
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