La Autoridad Bancaria Europea (EBA) ha iniciado una consulta pública sobre sus últimas directrices para prevenir el mal uso de fondos y la transferencia de determinados criptoactivos para el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo.
Con todo lo que está sucediendo últimamente en el mundo de las criptomonedas, esto parece una decisión inteligente. Siga leyendo para obtener más detalles.
¿De qué tratan las pautas?
Estas pautas propuestas para las “reglas de viaje” describen las responsabilidades de los proveedores de servicios de pago (PSP), los PSP intermediarios (IPSP), los proveedores de servicios de criptoactivos (CASP) y los CASP intermediarios (ICASP). ¿Qué hay en su lista de tareas pendientes? Detecte cualquier información faltante o incompleta en transferencias de fondos o criptoactivos y establezca procedimientos sólidos para gestionar transacciones sin la documentación adecuada.
La iniciativa de la EBA tiene como objetivo fomentar un entendimiento compartido y garantizar la aplicación coherente de la legislación de la UE, reforzando el sistema contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo (AML/CFT) en toda la UE. Se invita a las partes interesadas a proporcionar comentarios sobre estas directrices hasta el 26 de febrero de 2024.
¡No más movimientos furtivos!
El objetivo principal de estas directrices es detener el flujo de dinero y criptoactivos utilizados para financiar el terrorismo y otros delitos financieros. Al permitir la trazabilidad complete de estas transferencias, las autoridades estarán mejor equipadas para prevenir, detectar o investigar tales actividades ilícitas.
La EBA aboga por un enfoque unificado entre los PSP, IPSP, CASP, ICASP y otras autoridades relevantes de toda la UE. Este enfoque implica establecer mejores prácticas para manejar e identificar transferencias de dinero y criptoactivos que carecen de información esencial sobre el ordenante/pagador y el beneficiario/beneficiario.
Hacia un mundo criptográfico más seguro
Al crear un marco estandarizado para el intercambio de información y la cooperación, estas directrices tienen como objetivo mejorar la eficiencia del seguimiento de transferencias sospechosas, mejorando así la seguridad y la integridad de las transacciones financieras dentro de la UE.