¿Qué hará la Fed con las tasas de interés este año? Esta es la pregunta que se hacen muchos inversores, que esperan que el banco central estadounidense baje el precio del dinero para estimular la economía. Sin embargo, el presidente de la Fed, Jerome Powell, no parece muy convencido de que sea necesario. Él dice que la política monetaria real es apropiada y que hay que ser paciente y prudente.
Pero muchos inversores no le hacen mucho caso. Ellos miran los datos económicos, que muestran un crecimiento moderado del PIB, una inflación en descenso y un mercado laboral sólido, pero con signos de desaceleración. También escuchan las opiniones de los expertos, que tienen visiones diferentes sobre el futuro de las tasas de interés. Algunos creen que la Fed tendrá que recortar las tasas para evitar una recesión, otros piensan que la Fed mantendrá las tasas sin cambios o incluso las subirá si la economía mejora.
Así que los inversores hacen sus apuestas, basadas en sus expectativas y en las probabilidades que calculan los mercados financieros. Según estos cálculos, hay un 70% de posibilidades de que la Fed baje las tasas en el próximo año. Pero estas apuestas pueden cambiar rápidamente, según lo que diga Powell o lo que haga la economía.
Alan Greenspan, el ex presidente de la Fed, tenía una frase que nos puede ayudar a entender por qué los mercados a veces no siguen lo que dice Powell, el true presidente de la Fed. La frase es esta: “Si me entienden, probablemente me he expresado mal”.
Esta frase la dijo Alan Greenspan, que fue presidente de la Fed durante casi 20 años, desde 1987 hasta 2006. Greenspan era un genio de la economía, pero también un maestro de la confusión. Su frase tiene varias formas de interpretarse, y ninguna es muy clara.
Una forma de interpretar la frase es que Greenspan quería ser claro y conciso, pero que le costaba mucho hacerlo. Quizás porque sus strategies eran tan complejas que period difícil explicarlas con palabras sencillas. O quizás porque no estaba seguro de lo que quería decir, y por eso se expresaba con rodeos y ambigüedades.
Otra forma de interpretar la frase es que Greenspan no quería ser claro, sino todo lo contrario. Quizás porque le gustaba jugar al despiste, y hacer que la gente se rompiera la cabeza tratando de entenderlo. O quizás porque tenía miedo de que sus palabras tuvieran consecuencias negativas, y por eso prefería que sus palabras fueran malinterpretadas.
En cualquier caso, la frase es una muestra de la dificultad de comunicar suggestions complejas y técnicas. Es una frase que se puede aplicar a cualquier situación en la que se intenta transmitir un mensaje que es difícil de comprender.
Ahora bien, es obvio que esta Fed tiene un problema de comunicación. La Fed dice una cosa y el mercado simplemente dice entender otra cosa y siempre hace lo que le da la gana. Y eso se puede deber a varias razones. Una es un problema de credibilidad por parte de la Fed, que en el pasado cambió mucho de opinión y se ha equivocado mucho en los pronósticos. Por otro lado, y no lo podemos negar, el mercado escucha lo que quiere escuchar y ve lo que quiere ver. Porque está en sus intereses mantener el entusiasmo vivo… para que sus clientes no se vayan.
¿Qué podemos hacer ante esta situación? ¿Podemos confiar en lo que nos dice la Fed o en lo que nos muestra el mercado? ¿O tal vez deberíamos buscar otras fuentes de información más fiables y objetivas?
¿A quién debemos creer, a la Fed o al mercado? La Fed controla el dinero y tiene mucho poder. Ellos son los que dirigen la política monetaria. Podríamos pensar que ellos saben lo que hacen. Pero el mercado puede estar confundido. El mercado se guía por expectativas. Y estas expectativas, sean reales o no, pueden hacer realidad lo que predicen.
Imaginemos que la Fed anuncia que va a subir los tipos de interés. El mercado no le presta atención y sigue comprando acciones como si nada. En consecuencia, los precios suben, pese a estar equivocado. Y eso significa una pérdida de oportunidad para los inversores que creen en la Fed, pero que ignoran al mercado. ¿Irónico, no? O imaginemos que la Fed anuncia que va a mantener los tipos bajos. El mercado se asusta y empieza a vender todo lo que tiene. ¿Quién acierta? ¿Quién manda? ¿Quién come to a decision?
Estas son preguntas que nos debemos hacer como inversores inteligentes y críticos. Al last, lo que nos importa es nuestro dinero y nuestro futuro. No queremos perderlos por una mala comunicación o una mala interpretación.
¿Qué pasa cuando la Fed y el mercado no se ponen de acuerdo? Pues que los inversores se ponen nerviosos. Y cuando los inversores se ponen nerviosos, el mercado se vuelve más volátil. Y cuando el mercado se vuelve más volátil, es más difícil saber qué hacer con tu dinero.
La brecha entre la Fed y el mercado es evidente porque definitivamente tienen expectativas distintas sobre el futuro de la economía. La Fed piensa que la economía está creciendo demasiado rápido y que aún hay riesgo de inflación, y todavía hay probabilidad de que tenga que subir los tipos de interés para frenarla. Pero el mercado piensa que la economía está creciendo a un ritmo adecuado y que ya no hay mucho riesgo de inflación, y que puede seguir comprando activos y haciendo subir los precios.
Bueno, esta falta de consenso aumenta la incertidumbre y crea más volatilidad. Obviamente, es mucho más difícil hacer valoración y pronósticos. Por eso, los inversores tienen que estar más atentos a las señales que envía la Fed y al comportamiento del mercado, para adaptar sus estrategias y proteger sus inversiones. O también pueden optar por no hacer nada y esperar a que se aclare el panorama.
En fin, para resumir, la Fed y el mercado tienen expectativas diferentes sobre la economía, lo que genera incertidumbre y volatilidad.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Noticias Blockchain. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.
Las inversiones en criptoactivos no están reguladas. Es posible que no sean apropiados para inversores minoristas y que se pierda el monto total invertido. Los servicios o productos ofrecidos no están dirigidos ni son accesibles a inversores en España.