La economía no ha sido amable. Ha sido duro para los consumidores. Ha sido duro para las pequeñas empresas.
Especialmente las pequeñas empresas.
«Necesitamos cambiar el costo de vida en California», dijo Mona Aquino.
Aquino compró Pauly’s Pizza Joint en Miramar Road en San Diego hace 15 años. Dijo que los últimos cuatro años han sido los más difíciles.
“Todo se disparó”, dijo mientras agarraba una caja de pizza vacía. “Esto es lo que más utilizamos. Solía costar unos 15 dólares la funda (de cajas). Ahora cuesta entre 35 y 40 dólares”.
Según el Instituto de Políticas Públicas de California, los precios para todos han aumentado un 23% desde abril de 2019. El instituto dijo que los precios deberían haber aumentado solo un 11%.
“Todo el mundo está tratando de tomar atajos. Todo el mundo está intentando ahorrar dinero”, suspiró Aquino.
Dena Brown tenía preocupaciones similares en la calle donde supervisa la construcción de The Bunker. Brown nunca antes había sido propietario de un negocio.
“No, nunca lo he hecho. Todo esto es un capítulo nuevo y fresco en mi vida”, dijo Brown. «Tuve asesores que me animaron a no hacerlo».
Brown está diseñando The Bunker para miembros veteranos y en servicio activo. Faltan sólo un par de semanas para su apertura. Si bien los costos por sí solos son reveladores, Brown dijo que sortear la burocracia gubernamental no ha hecho la vida más fácil.
«Déjenme saber A, B y C, que necesito ‘esto’ para ‘esto’ en lugar de tener que regresar a su oficina tres veces para obtener este proceso y movimiento».
“Está alejando a las pequeñas empresas”, coincidió Aquino.
Ambos propietarios saben que la economía es igual de dura para sus clientes. Brown y Aquino tienen que equilibrar sus propias facturas con lo que cobran a sus clientes.
“¿Estás mirando cómo te irá mañana? ¿Cómo te fue anoche? Siempre estás mirando la comparación”, dijo Aquino.
Brown dijo que otros nuevos propietarios deben investigar para estar mejor preparados que ella antes de abordar The Bunker. Lamentablemente, Aquino dijo que probablemente no volvería a comprar Pauly’s Pizza Joint si tuviera la oportunidad hoy.
«Sabes, es California y sólo esperamos que mejore el próximo año», se encogió de hombros.