El flujo de efectivo es una ecuación bastante fácil. Es un reflejo de la entrada o el efectivo recibido de una empresa frente a su salida o dinero gastado. Es posible que haya escuchado que se refieren a ellas como cuentas por cobrar y cuentas por pagar.
Mantengamos las cosas simples.
Si su negocio gana más dinero del que gasta, tiene un flujo de efectivo positivo. Si ocurre lo contrario, entonces su empresa tiene un flujo de caja negativo. Ninguno de los estados es permanente y el flujo de caja puede fluctuar a lo largo del año debido a factores como su industria, ciclo de ventas, cadena de suministro y gastos únicos.
La creación de flujo de efectivo es menos una decisión comercial activa y más una ocurrencia natural en el ciclo comercial. Al tratar de superar los problemas de flujo de efectivo negativo, una opción obvia es aumentar las ganancias. Pero eso es más fácil decirlo que hacerlo. Es por eso que las empresas tienden a enfocarse en el otro lado de la ecuación: reducir los gastos.
Reducir los gastos mediante la reducción de costos puede parecer la solución simple, pero las implicaciones pueden ser numerosas. Profundicemos en cómo las empresas pueden reducir sus salidas y examinemos cómo la gestión eficaz del efectivo puede ayudar a crear flujo de efectivo.
Es un corte, no un afeitado.
Reducir costos a veces puede confundirse con eliminarlos por completo. «Reducir costos» puede ser una mejor manera de expresarlo, y viene con muchas opciones potenciales. Aquí hay algunos.
Arrendamiento
Insumos y equipos para producción, terrenos para edificaciones, inventario para ventas. Muchas empresas optan por comprar estos artículos. Pero para fines de flujo de efectivo, el arrendamiento puede proporcionar un impulso positivo porque da como resultado pagos programados más pequeños, lo que deja efectivo para necesidades comerciales más inmediatas. Además, los pagos de arrendamiento se pueden cancelar como un gasto comercial en sus impuestos.
Revisando gastos
Ciertos gastos recurrentes son el costo de hacer negocios y se incluyen como cuentas por pagar. Incluyen cosas que se necesitan para operar, como alquiler, suministros y nómina. Otros, como los servicios de suscripción que continúan después de su uso previsto, pueden pasarse por alto al administrar el flujo de efectivo.
Por eso es tan importante mantener un proceso de revisión eficaz, como la elaboración de un balance general. Este proceso puede ayudar a eliminar estos valores atípicos y ayudar a crear un flujo de caja positivo.
Planificación de compras
La compra estratégica se trata menos de reducir costos y más de sincronizar su impacto para que coincida con el momento en que una empresa tiene más efectivo disponible. Esto puede tomar una forma simple, como negociar los pagos de fin de mes con los proveedores. O el momento puede ser complejo, como con un programa de pago incremental que gira en torno al flujo de ingresos de la empresa. Cualquiera de los dos métodos puede ayudar a contribuir a una mejor gestión del efectivo.
Para ahorrar dinero, los dueños de negocios pueden ser creativos con las compras. Comprar al por mayor es una opción, ya que los proveedores tienden a ofrecer tarifas con descuento para compras más grandes. Algunas empresas con necesidades de suministro similares optan por formar una cooperativa para aunar su poder adquisitivo.
Tape los agujeros, manténgase a flote
Mantener el flujo de efectivo es importante para cualquier negocio. Mire su propio negocio para ver cómo podría encontrar un flujo de caja positivo y sostenible:
- Arrendar en lugar de comprar
- Revisar gastos por costos obsoletos o innecesarios
- Encuentre formas de ampliar o aumentar el poder adquisitivo
Muchos factores de costo son exclusivos de cada industria y negocio individual, pero esto sigue siendo el mismo: Cree un flujo de efectivo positivo al reducir los gastos. Conéctese con un banquero comercial de Chase para analizar cómo puede mejorar el flujo de efectivo para su negocio.
Únicamente con fines informativos/educativos: las opiniones expresadas en este artículo pueden diferir de las de otros empleados y departamentos de JPMorgan Chase & Co. Las opiniones y estrategias descritas pueden no ser apropiadas para todos y no pretenden ser un consejo/recomendación específico para ninguna persona. . La información se obtuvo de fuentes que se consideran confiables, pero JPMorgan Chase & Co. o sus afiliadas y/o subsidiarias no garantizan su integridad o exactitud. Debe considerar cuidadosamente sus necesidades y objetivos antes de tomar cualquier decisión y consultar a los profesionales apropiados. Las perspectivas y el desempeño pasado no son garantías de resultados futuros.
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