En 1799, el El naturalista y explorador alemán Alexander von Humboldt emprendió un viaje por las Américas, catalogando todo lo que pudo encontrar: plantas, minerales, carpinchos, canales, etc. Humboldt propuso que el mundo era “un gran organismo vivo donde todo estaba conectado”, un teoría que inspiraría a Charles Darwin. Introdujo el concepto de ecosistemas y fue uno de los primeros naturalistas en notar el impacto destructivo de la humanidad en la Tierra.
En 2017, el fotógrafo Christopher Edward Rodríguez se topó con los escritos de Humboldt. Había estado pensando en lo que una cámara realmente puede ver cuando casi cada centímetro del planeta ha sido «formado, dirigido y fotografiado hasta la muerte». Adoptó las ideas de Humboldt y viajó por las Américas para crear una serie de imágenes que muestran el planeta «como si nunca antes se hubiera visto». Usó largas exposiciones, iluminación artificial y geles de colores para «eludir la precisión científica de la cámara». Su objetivo para las fotografías era transmitir un estado de ánimo de «extrañeza constante», que encarna un principio olvidado de Humboldt: «Todo es interacción y reciprocidad».