Siva Aditya Kancherla, o Adi, como lo llaman cariñosamente, resulta evidente cómo una combinación de experiencia técnica, toma de riesgos y una visión implacable han dado forma a su notable viaje en el espacio blockchain.
“Todo empezó con curiosidad”, comparte Adi. “Entender blockchain no se trataba sólo de aprender nueva tecnología; se trataba de imaginar un mundo descentralizado y las oportunidades que podría desbloquear”. Esta perspectiva ha guiado su camino desde una base académica estelar hasta convertirse en un pionero en la criptoeconomía.
El viaje de Adi comenzó con logros notables durante sus estudios en Andhra Pradesh, donde ocupó el puesto 17 en los exámenes estatales de Certificado de Escuela Secundaria y obtuvo la prestigiosa Beca Prathibha. “La educación me proporcionó una base sólida”, recuerda. “Me inculcó la disciplina y el impulso para sobresalir, ya sea en el campus BITS Pilani Goa o más tarde en la Universidad de Wisconsin-Madison”.
Los inicios de su carrera los dedicó a perfeccionar sus habilidades técnicas en Oracle en India y durante una pasantía en Amazon Seattle, pero fue su rol en Google Cloud el que marcó un punto de inflexión fundamental. «En 2017, tomé una decisión que muchos consideraron imprudente: invertí todo mi 401(k) en criptomonedas», dice Adi con una sonrisa. “Para mí, no fue sólo una medida financiera; fue una declaración de creencia en el potencial transformador de blockchain”.
La apuesta dio sus frutos, otorgándole independencia financiera y preparando el escenario para sus proyectos empresariales. «Dejar Google fue un acto de fe», admite Adi. «No es fácil alejarse de la seguridad de Silicon Valley, pero sabía que quería dedicarme a construir en el espacio blockchain».
Esta decisión condujo a la creación de nuevas empresas innovadoras, cada una de las cuales aborda desafíos únicos en el ecosistema criptográfico. «Con Picolo, nos centramos en la gestión descentralizada de la información para web3», explica Adi. «El apoyo de Menlo Ventures y Village Global validó nuestros esfuerzos». Siguió Mavrik Labs, simplificando la creación de NFT en Ethereum. «Queríamos que los sistemas blockchain fueran accesibles», añade, destacando el apoyo de Binance Labs a la empresa.
El logro más importante de Adi hasta el momento es Infinity, el agregador de mercados NFT más grande del mundo. «Infinity trataba de redefinir la forma en que la gente compra y colecciona NFT», dice. El proyecto recaudó 3 millones de dólares, lo que subraya su impacto en el mercado.
Para Adi, el éxito no se trata sólo de ganancias financieras. “Se trata de crear soluciones que importen”, enfatiza. Sus primeras inversiones en criptomonedas le permitieron centrarse en proyectos que se alinean con su visión, libres de las limitaciones de las presiones monetarias inmediatas.
Al reflexionar sobre su viaje, Adi ofrece consejos para quienes ingresan al espacio criptográfico: “Es esencial ser curioso y adaptable. Pero, sobre todo, esté dispuesto a correr riesgos calculados. La línea entre el éxito y el fracaso a menudo depende de tu capacidad para ejecutar con precisión”.
El viaje de Adi es un ejemplo inspirador de cómo decisiones audaces, combinadas con experiencia técnica y una visión clara, pueden conducir a un éxito transformador. «El futuro de las economías descentralizadas está lleno de posibilidades», afirma. «Y para quienes estén dispuestos a innovar, las recompensas son inmensas».