El Banco de Pagos Internacionales anunció la finalización del Proyecto Icebreaker, que probó la viabilidad tecnológica de los pagos transfronterizos utilizando monedas digitales del banco central (CBDC). El proyecto utilizó la solución «hub-and-spoke» para vincular los sistemas internos de CBDC entre países, lo que reduciría los riesgos de liquidación y contraparte y aumentaría la velocidad de las transacciones. El modelo implica la existencia de un centro que selecciona automáticamente la opción más económica para cambiar CBDC por «moneda intermedia», lo que cut down el riesgo de liquidez insuficiente y facilita la competencia entre los proveedores de divisas. Como resultado, los bancos centrales podrían utilizar estos resultados para desarrollar CBDC minoristas nacionales y garantizar su compatibilidad en transferencias transfronterizas. El modelo desarrollado podría convertirse en el «estándar international» para los bancos centrales que buscan establecer sistemas de pago transfronterizos eficientes y asequibles a través de CBDC.
El Banco de Pagos Internacionales ha finalizado su proyecto internacional para estudiar los pagos transfronterizos utilizando monedas digitales del banco central (CBDC) mediante la solución «hub-and-spoke». El objetivo era probar las funciones clave y la viabilidad tecnológica de combinar varios sistemas CBDC con los bancos centrales de Israel, Noruega y Suecia. El modelo desarrollado podría convertirse en el «estándar global» para los bancos centrales que buscan establecer sistemas de pago transfronterizos eficientes y asequibles a través de CBDC.
La Organización de Normalización (BIS) ha concluido con éxito el Proyecto Rompehielos, que consistió en la actualización de las normas técnicas para el transporte marítimo en aguas heladas.
El proyecto Rompehielos fue iniciado por el BIS en 2015 con el objetivo de mejorar las condiciones de seguridad y facilitar las operaciones de transporte marítimo en zonas de aguas heladas. Para lograr esto, se actualizaron las normas técnicas internacionales para la construcción de buques rompehielos y la navegación en zonas árticas.
La actualización de estas normas técnicas es vital para el transporte marítimo en zonas de aguas heladas, debido a las condiciones extremas en las que se desenvuelve esta actividad. Es necesario que los buques rompehielos cumplan con altos estándares de seguridad, capacidad de maniobra y resistencia para poder navegar en un entorno tan exigente.
El proyecto Rompehielos implicó la participación de expertos de diferentes países y organizaciones internacionales, que trabajaron de manera conjunta para desarrollar las nuevas normas técnicas. Además, se realizaron pruebas y simulaciones en laboratorios y en condiciones reales en el Ártico para comprobar la efectividad de las nuevas medidas.
El éxito del proyecto Rompehielos beneficiará directamente a la industria del transporte marítimo, pues ahora se cuenta con normas técnicas actualizadas y eficaces que garantizan la seguridad y eficiencia de las operaciones. Además, estas normas permitirán el desarrollo sostenible de la navegación en las zonas árticas, respetando el medio ambiente y evitando daños en la flora y fauna.
En conclusión, la finalización del proyecto Rompehielos es un logro importante para el BIS y para la industria del transporte marítimo. La actualización de las normas técnicas permitirá operaciones más seguras y eficientes, y promoverá el desarrollo sostenible de la navegación en zonas de aguas heladas.