La disputa por la tierra del cemento Portland ilustra vívidamente las deficiencias del gobierno como único árbitro de la verdad.

El registro de tierras centralizado, supervisado por personas impulsadas por motivos sin escrúpulos dentro de un sistema de justicia penal defectuoso, ha resultado en pérdidas asombrosas y ha permitido que los malhechores escapen de la justicia.

Los sistemas centralizados son inherentemente vulnerables y susceptibles a la manipulación y explotación, particularmente cuando son administrados por funcionarios corruptos.

La responsabilidad confiada al gobierno y sus agencias (incluidos los certificados de nacimiento, los pasaportes y los registros de propiedad) requiere una institución tan confiable y virtuosa como los propios dioses. Pero los gobiernos y las instituciones están compuestos de individuos falibles.

Entonces surge la pregunta: ¿Cómo podemos realizar transacciones e interactuar dentro de un entorno sin confianza? ¿Cómo pueden las personas que carecen de confianza mutua entablar negocios? La solución radica en el protocolo de confianza, un mecanismo que permite a las partes realizar negocios sin requerir una confianza implícita entre sí ni una verificación de terceros. La credibilidad de este protocolo está garantizada mediante una codificación inteligente y la participación activa de la comunidad.

Los términos contractuales están codificados y son autoejecutables, y los registros de transacciones son transparentes y accesibles para todos. Cada miembro de la comunidad mantiene un libro de contabilidad de estas transacciones.

Si una de las partes incumple sus obligaciones, toda la comunidad actúa como testigo y puede aislar al transgresor en futuros tratos.

Dado que todo el mundo tiene una copia, alterar el registro sin consenso se vuelve casi imposible y no existe un único punto de falla.

Este protocolo de confianza está incorporado en blockchain. Su fortaleza no reside en las garantías institucionales sino en la integridad de su comunidad participante.

Utilizando criptografía, codificación inteligente y participación comunitaria, la tecnología puede liberarnos de actores estatales corruptos y del dominio de instituciones poderosas, restaurando la libertad personal y social sobre nuestras identidades, datos y activos.

– El señor Njenga, creador de contenidos interdisciplinario, es un entusiasta de la Net 3.. [email protected].

Share.
Leave A Reply