Cada vez más estadounidenses pierden miles de dólares a causa de un esquema que los estafadores tardan semanas o meses en llevar a cabo.
Las estafas de «matanza de cerdos» recibieron su nombre de la idea de que los estafadores utilizan halagos y vínculos falsos para «engordar» a sus víctimas. La estrategia ha permitido acumular miles de millones de dólares en fondos robados, especialmente en forma de criptomonedas.
Según el Informe sobre delitos en Internet del FBI, las pérdidas por estafas de inversión aumentaron un 38% en 2023 y alcanzaron un nuevo récord. De los 4.570 millones de dólares en fondos denunciados como robados, 3.960 millones de dólares estaban relacionados con inversiones fraudulentas en criptomonedas.
«Conocí a mi estafador a través de una aplicación de citas llamada Bumble, donde pasó unas seis semanas cortejándome», dijo Carina, una víctima de matanza de cerdos que pidió ser identificada sólo por su nombre de pila.
Conoció a su estafador en la aplicación de citas Bumble y anteriormente reveló que su estafador afirmaba vivir un estilo de vida lujoso e invertir mucho en criptomonedas. Después de meses de intercambiar mensajes, el estafador la convenció de depositar un total de $152,000 en un sitio web diseñado para imitar el intercambio legítimo de criptomonedas Kraken.
Carina finalmente rastreó sus fondos hasta una casa de cambio en Tailandia. Entregó los detalles a las autoridades, pero no recuperó los fondos robados.
Según un informe de las Naciones Unidas, en el sudeste asiático las estafas de matanza de cerdos se llevan a cabo a menudo con trabajo forzado. Y a pesar de que empresas de cadenas de bloques como Chainalysis rastrean millones de criptomonedas robadas, la presencia de estos casos en múltiples jurisdicciones crea un obstáculo para que las fuerzas del orden se apoderen de los fondos robados.
Mire el video de arriba para obtener más información sobre cómo los estafadores de criptomonedas están convenciendo a los estadounidenses de que renuncien a los ahorros de toda su vida y cómo las fuerzas del orden están tratando de contraatacar.
