Redacción ACI Prensa, 17/11/2024 / 08:00 am
“Con Dios, todo; sin Dios, nada”: Esta máxima de su madre dejó una profunda impresión en Luz Maribel Jiménez, directora de recursos humanos de Carnicerías Jiménez, una premiada cadena de tiendas de comestibles familiares católicas en Chicago.
En entrevista con ACI Prensa, socio de noticias en español de CNA, Jiménez compartió los principios rectores de su familia para inspirar a los emprendedores que aspiran a liderar un negocio con valores y propósito.
“Las lecciones más importantes que aprendí de mis padres incluyen poner a Dios y a la familia en primer lugar, mantener una sólida ética de trabajo, sentir orgullo y amor por lo que haces, tratar a todos con respeto y ofrecer ayuda siempre que sea posible. Estas son sólo algunas de las lecciones”, dijo Jiménez, una de las hijas de la familia.
Un legado nacido de la fe, el esfuerzo y el sacrificio
En 1975, José Jiménez y su esposa, Guadalupe, abrieron una frutería en la esquina de 26th y Pulaski, marcando el comienzo del legado de la familia Jiménez en Chicago. A partir de ese primer negocio, pudieron expandir y transformar su emprendimiento en Carnicerías Jiménez, ahora una cadena de ocho tiendas que ofrece productos frescos a la comunidad.
Hoy, José y sus hijos administran el negocio, que es muy apreciado por la contribución que hace a la comunidad local. Además, los empleados de la empresa aprecian el ambiente familiar.
“Mis padres construyeron este negocio desde cero. Lo construyeron sobre una base de fe, amor, respeto, trabajo duro, dedicación y sacrificio”, compartió Luz Maribel Jiménez.
Guadalupe, madre de la familia y uno de sus pilares, falleció el 7 de febrero de 2022, dejando un gran vacío pero lecciones valiosas, relató su hija.
“Sin duda, el desafío más importante que hemos encontrado como familia y como empresa ha sido la muerte de mi madre. Aunque siempre estará en nuestros corazones, jugó un papel muy importante en nuestras vidas”.
Jiménez, quien continúa su legado, compartió con ACI Prensa algunas de las lecciones que vivió su madre.
1. ‘La fe es fundamental’.
Según Jiménez, la fe católica ha sido el motor que sustenta a la familia en todas sus decisiones. “Mis padres siempre pusieron a Dios como base de cada acción, desde la más pequeña hasta la más trascendental”.
Un claro ejemplo de ello fue cuando la familia abrió su tienda en Fullerton Avenue. José, el patriarca de la familia, decidió construir una capilla privada en la tienda para mantener viva su devoción a San Martín de Porres, que practicó mientras crecía en México. Esta decisión le permite a él y a su equipo rezarle al santo y también a la Virgen de Guadalupe y a San Judas Tadeo.
“La fe ha sido fundamental” en el desarrollo y crecimiento del negocio”, afirmó Jiménez.
“La oración y la reflexión han sido fuerzas orientadoras que nos han ayudado a aclarar nuestra visión y tomar decisiones cruciales. Ha fortalecido nuestra resiliencia en tiempos difíciles, permitiéndonos mantener una actitud positiva y seguir avanzando”, explicó Jiménez.
2. ‘Mantener y transmitir los valores familiares’.
(La historia continúa a continuación)
Suscríbete a nuestro boletín diario
La continuidad de los valores familiares, según Jiménez, es otro de los pilares de Carnicerías Jiménez.
“Mis padres han defendido y transmitido nuestros valores familiares a lo largo de generaciones fomentando la comunicación abierta, compartiendo historias, fomentando la participación en las tradiciones y predicando con el ejemplo”, relató.
En particular, su padre ha sido un narrador excepcional: “Desde que tengo uso de razón, se relacionaba con nosotros directamente, utilizando ejemplos de sus experiencias para ilustrar sus puntos, y siempre concluyendo con una lección moral”.
En este sentido, se dirigió a las futuras generaciones de jóvenes latinos para instarlos a “recordar siempre sus raíces y abrazar y celebrar su fe, familia, tradiciones y talentos”.
“Su fe los guiará por el camino correcto, mientras que la gratitud por sus bendiciones los empoderará. Las tradiciones familiares y los valores compartidos que mantienen son conexiones vitales para el futuro”, aconsejó.
3. Sea agradecido: ‘No podemos lograr el éxito solos’.
Otra de las principales lecciones que la familia Jiménez puede dejar a las futuras generaciones de empresarios católicos, dijo, es haber aprendido “a liderar [their employees] con integridad, respeto y gratitud”.
“Aunque el crecimiento empresarial y financiero es crucial, reconocemos que no podemos lograr el éxito solos. Debemos estar agradecidos con nuestros empleados, clientes, las comunidades donde estamos ubicados, proveedores y asesores: todos aquellos que han contribuido a construir nuestro negocio”, señaló.
4. Infórmese constantemente; «Nunca pierdas de vista tus sueños».
Jiménez también aconsejó a los emprendedores apostar por el aprendizaje continuo ya que, según ella, “la educación es fundamental para crear cambios positivos en tu vida y en la vida de los demás”.
“Nunca pierdas de vista tus sueños; tienes la capacidad de lograrlos. Además, recuerda siempre agradecer a quienes te apoyaron en el camino hacia tus metas”, añadió.
5. ‘Mantener un ambiente donde los empleados se sientan como en familia’.
Una de las prioridades de la familia Jiménez siempre ha sido el bienestar de sus empleados. Jiménez destacó que la empresa ha trabajado para crear “un ambiente en el que se sientan en familia, valorados y apreciados”.
“Nuestra mentalidad ha sido ayudar a nuestros empleados, a nuestra comunidad y a todos aquellos que nos han ayudado a cumplir 50 años en el negocio”, dijo.
Además, recordó que las políticas de la empresa se basan en sólidos principios de “honestidad, humildad, servicio y gratitud”.
6. ‘El dinero es una herramienta, nunca un fin’.
Para la familia Jiménez, los negocios no deben ser sólo un medio para obtener ganancias. El director de recursos humanos enfatizó que “hacer negocios por obtener ganancias nunca es el camino” y agregó que “el resultado final y la toma de decisiones basada únicamente en números no debe ser la única métrica para definir si nuestro negocio o empresa es rentable”. .”
“El dinero es una herramienta, nunca un fin”, señaló, enfatizando que la verdadera medida de su éxito es lo que pueden hacer por la comunidad.
“Nuestro negocio siempre se ha medido a sí mismo y su rentabilidad por lo que podemos hacer para continuar brindando empleo y estabilidad en nuestros vecindarios. Hacemos nuestro mejor esfuerzo para brindar/donar asistencia financiera a la comunidad local, la Iglesia Católica y a nivel global”, señaló Jiménez.
Al ser un negocio exitoso, Carnicerías Jiménez ha logrado involucrarse localmente donando asistencia financiera y alimentaria a organizaciones benéficas, iglesias y escuelas. Además, patrocina eventos comunitarios y ofrece programas educativos y capacitación laboral para grupos desfavorecidos.
A nivel mundial, la compañía, bajo el liderazgo de José Jiménez, ha brindado ayuda en casos de desastre, enviando suministros a diversas regiones como México, Centroamérica, Haití y Puerto Rico, y ayudando a construir escuelas, clínicas y hogares en áreas empobrecidas.
7. Un último consejo: ‘Orad siempre; Prestad siempre atención a las palabras de Jesús.’
Al final de la entrevista, Jiménez enfatizó a los jóvenes que la clave para llevar un negocio con valores es permanecer siempre en oración: “Oren siempre; Siempre prestemos atención a las palabras de Jesús, a sus enseñanzas y a su ejemplo en todo lo que hagamos en esta vida”.
También enfatizó la importancia de cultivarse a uno mismo y a los empleados, evitando la tentación de explotar los recursos únicamente para obtener ganancias financieras.
«Sepa que la calidad de vida que cree, la calidad del ambiente de trabajo para usted y su gente tendrán un enorme impacto en la rentabilidad de sus esfuerzos», explicó.
Finalmente, Jiménez compartió dos citas que siempre la han acompañado y resumen su filosofía de trabajo y de vida:
-
“Ningún trabajo es insignificante. Todo trabajo que enaltece a la humanidad tiene dignidad e importancia y debe realizarse con minuciosa excelencia” – Martin Luther King Jr.
-
“Ad Majorem Dei Gloriam” (“Para mayor gloria de Dios”), el lema de la Compañía de Jesús
esta historia fue publicado por primera vez por ACI Prensa, socio de noticias en español de CNA. Ha sido traducido y adaptado por CNA.