Cuando comencé a investigar la legislación que entraría en vigor en 2024, me centré principalmente en los nuevos impuestos que entrarán en vigor el 1 de enero. Si sabe algo sobre California, sabrá que el término «impuestos» ampliamente definido es solo una parte de la historia. .
El costo incalculable de los negocios en el estado dorado es el costo creciente de literalmente todo lo relacionado con la prestación de un servicio o la venta de un producto, desde el costo creciente de las materias primas hasta los costos de nómina cada vez mayores por empleado.
Además de las propuestas de aumento del Impuesto sobre Ventas y Uso (IVU) en todo el estado, los empleadores en California también verán un aumento en su tasa de la Ley Federal del Impuesto de Desempleo (FUTA). Como hemos visto en innumerables historias desde la pandemia, el sistema estatal de desempleo fue un desastre absoluto, lo que resultó en más de $32 mil millones en pagos fraudulentos. Durante la pandemia, veintidós estados pidieron préstamos al gobierno federal para poder seguir pagando prestaciones por desempleo, y esos estados deben devolver ese dinero, más intereses.
La mayoría de los estados ya lo han hecho. Pero California es uno de los cinco estados que no ha reembolsado esos fondos y ahora California debe 18.900 millones de dólares en deuda federal por desempleo. California presentó un superávit presupuestario proyectado de $97.5 mil millones en el año fiscal 2022-2023 y muchas empresas pedían al gobernador que usara parte de ese superávit para pagar la deuda federal de desempleo de California.
El gobernador acordó un pago de mil millones de dólares para la deuda, pero ahora el gobernador Newsom quiere cancelar ese gasto para ayudar a cubrir el déficit presupuestario del estado.
Como resultado de la falta de pago de su deuda de desempleo por parte de California, el estado verá un aumento en su tasa FUTA haciendo que los pagos sean del ,6% en full, el gran beneficio aquí es que este ajuste de tasa es retroactivo y se aplicará a la nómina a partir de 2023. Como podría esperarse, los propietarios de pequeñas empresas no están entusiasmados con el pago de una deuda debido, en parte, a la incapacidad del estado para cubrir eficientemente incluso las operaciones más básicas del gobierno.
Además del aumento de FUTA, muchos asalariados verán un aumento en sus impuestos estatales sobre la nómina por discapacidad. Históricamente, California ha financiado el programa de seguro de discapacidad del estado a través de un impuesto sobre la nómina del 1,1% sobre salarios de hasta $153,164. A partir de 2024, este techo salarial se eliminará, sometiendo todos los ingresos salariales al impuesto sobre la nómina. Esto significa que la tasa impositiva marginal máxima sobre la renta individual del estado sobre los ingresos salariales (no todos los ingresos) será del 14,4 por ciento.
Como señala la organización nacional sin fines de lucro Tax Basis, 34 estados comenzarán el nuevo año con cambios impositivos notables, incluidos 15 estados que recortarán las tasas impositivas individuales o corporativas. Estos estados contrastan marcadamente con California, que aumentará el impuesto estatal sobre la nómina en un 1,1%, además de elevar el techo salarial e implementar el aumento del impuesto FUTA.
En 2022, el Proyecto de Ley del Senado 951 (presentado por María Elena Durazo de Los Ángeles) derogó el límite salarial para las contribuciones al fondo del SDI, por lo que todos los salarios quedaron sujetos a la tasa de contribución del SDI.
Otros cambios importantes que se están produciendo para los empleadores en el Estado Dorado incluyen:
- Los trabajadores de comida rápida obtendrán un aumento del salario mínimo a $20 por hora el 1 de abril.
- Está previsto que los trabajadores de la salud vean los primeros aumentos en su salario mínimo el 1 de junio.
- Los trabajadores en California recibirán un mínimo de cinco días de licencia por enfermedad al año, en lugar de tres, que acumularán una vez que hayan estado empleados durante 200 días.
- Las empresas que deseen comprar vehículos eléctricos verán una reducción del 50%, o en algunos casos la eliminación, del crédito fiscal federal para modelos de vehículos eléctricos seleccionados.
- Aumento de los impuestos sobre la nómina, incluidas las tasas impositivas SDI y FUTA.
Sara Catalán es presidenta de la Asociación de Contribuyentes del Condado de Orange
