El Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ) ha acusado a dos hombres de perpetrar un esquema Ponzi criptográfico que defraudó a inversores por aproximadamente 25 millones de dólares.
Según un comunicado de prensa del Departamento de Justicia, David Gilbert Saffron, de Australia, de 51 años, y Vincent Anthony Mazzotta Jr., de California, de 52 años, operaron un prepare fraudulento de criptoinversión que atraía a las víctimas con falsas promesas de altos rendimientos.
El Departamento de Justicia acusa a dos hombres por operar un esquema criptográfico
Según documentos judiciales, Saffron y Mazzotta supuestamente presentaron su system a los inversores como programas que utilizaban robots comerciales automatizados de inteligencia synthetic para intercambiar activos en el mercado de cifrado.
El dúo promovió los programas bajo varios nombres, incluidos Bitcoin Prosperity Administration, Cloud9Cash, Omicron Rely on, Circle Society y Intellect Money. Saffron y Mazzotta crearon una entidad falsa llamada Reserva Federal de Criptomonedas, que pretendía recuperar activos digitales perdidos para que el strategy pareciera legítimo.
Los presuntos estafadores crearon un patrón para inducir a las víctimas a poner su dinero en uno de los programas de inversión en criptomonedas y pedirles a los inversores que pagaran a la Reserva Federal de Cripto para investigar y recuperar sus pérdidas. Saffron ideó esta estrategia al acercarse a las víctimas bajo múltiples alias, incluidos David Gilbert y Dave Gabe, bajo personajes en línea como Blue Wizard y Bitcoin Yoda.
Destruir y ocultar pruebas
Mientras Saffron y Mazzotta continuaron con el system, utilizaron 25 millones de dólares en criptoactivos de los inversores para financiar sus lujosos estilos de vida. Pagaron por un chef private, alojamiento en hoteles de lujo, alquiler de mansiones privadas, guardias de seguridad y vuelos fletados en jet.
Además, el dúo conspiró para destruir pruebas falsificando registros y obstruyendo procedimientos oficiales. También conspiraron para ocultar las fuentes y la ubicación de las inversiones de las víctimas mediante el uso de mezcladores y vasos criptográficos y la implementación de métodos como el salto de cadena de bloques.
El Departamento de Justicia acusó a Saffron y Mazzotta de conspiración para cometer fraude electrónico, conspiración para obstruir la justicia, conspiración para cometer lavado de dinero y lavado de dinero.
Si bien cada uno enfrenta penas máximas de 20, 10 y cinco años de prisión por varios cargos, Saffron enfrenta una pena adicional de 10 años de prisión por presuntamente cometer delitos graves mientras se encontraba en libertad preventiva. Anteriormente, en septiembre de 2019, la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos lo acusó de participar en un strategy fraudulento.
Mientras tanto, el Departamento de Justicia ha pedido a las víctimas del strategy que se comuniquen a través de una línea de contacto designada y un correo electrónico.