China está luchando contra los brotes de COVID desde Zhengzhou en la provincia central de Henan hasta Chongqing en el suroeste.

Guangzhou, China, cerró su distrito más grande, mientras que las escuelas de Beijing se trasladaron a clases en línea mientras las autoridades luchan contra numerosos brotes de COVID-19 en todo el país.

Guangzhou, una metrópolis del sur que alberga a casi 19 millones de personas, anunció el lunes un cierre de cinco días para el distrito más poblado de Baiyun, suspendió los servicios de comedor y cerró los clubes nocturnos y teatros en el principal distrito comercial.

En Beijing, donde las autoridades informaron 962 nuevas infecciones, los estudiantes de las escuelas de varios distritos comenzaron a estudiar en línea después de que las autoridades pidieron a los residentes de algunas de las áreas más afectadas que se quedaran en casa.

Las autoridades sanitarias de la capital también informaron de dos muertes relacionadas con la COVID-19 tras anunciar el día anterior la primera muerte en más de seis meses. Los expertos médicos fuera de China son muy escépticos sobre el número oficial de muertos por COVID en el país de menos de 5.300 dada la experiencia internacional con el virus, aunque las duras restricciones de Beijing han mantenido los casos y las muertes mucho más bajos que en otros lugares.

Los casos de COVID están aumentando en toda China, con brotes en regiones que van desde Zhengzhou, en la provincia central de Henan, hasta Chongqing, en el suroeste.

Las autoridades sanitarias chinas informaron 26.824 casos locales para el domingo, cerca del pico del país en abril.

Mientras que el resto del mundo vive con COVID-19, China se ha apegado a una estrategia estricta de «cero COVID» que se basa en bloqueos, pruebas masivas y controles fronterizos para erradicar el virus dondequiera que aparezca.

A pesar de relajar algunas restricciones de COVID, incluida la reducción de la cuarentena para las llegadas internacionales de siete a cinco días, y pedir medidas más específicas, Beijing ha descartado repetidamente un cambio fundamental lejos del «COVID cero», incluso cuando aumentan las frustraciones públicas con la política.

Los mercados bursátiles asiáticos y los precios del petróleo cayeron el lunes cuando los inversores se prepararon para una mayor interrupción económica debido al aumento de casos.

El lunes, el periódico People’s Daily, el portavoz del Partido Comunista Chino, publicó el último de una serie de artículos que enfatizan la necesidad de detectar los casos temprano y evitar una respuesta de «talla única».



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