Música a la carta. Programas de televisión. Servicios de telefonía móvil. Retransmisiones deportivas profesionales. Audiolibros. Noticias. Videojuegos. Software informático.
Cada vez se venden más productos y servicios mediante suscripción en línea, lo que ofrece más comodidad y personalización, pero también plantea nuevos problemas a los consumidores. Se ha acusado a las empresas de suscribir a personas sin su consentimiento, renovar sus suscripciones sin previo aviso e imponer una serie de obstáculos a quienes quieran darse de baja.
Sin embargo, los californianos pronto recibirán más protección contra este tipo de abusos, incluido el derecho a cancelar la suscripción con un solo clic. El martes, el gobernador Gavin Newsom promulgó la ley 2863 de la Asamblea, propuesta por la asambleísta Pilar Schiavo, demócrata de Chatsworth, que impone una serie de salvaguardas a los contratos de suscripción firmados o renovados después del 1 de julio de 2025.
«Los consumidores están hartos de las suscripciones automáticas desenfrenadas, en las que resulta casi imposible poner fin a algo que el consumidor ya no quiere», dijo Robert Herrell, director ejecutivo de la Federación de Consumidores de California, que patrocinó el proyecto de ley. «Debe ser tan sencillo cancelar una suscripción como lo es suscribirse a ella».
La medida se aplica a las suscripciones o contratos de compra que se renuevan automáticamente, continúan hasta su terminación o pasan de ser gratuitos a pagos automáticamente a menos que se cancelen. Antes de poner la factura de un consumidor en piloto automático, dice la ley, las empresas deben obtener «consentimiento afirmativo expreso». En otras palabras, nadie debería sorprenderse de descubrir que han sido inscritos.
También exige que las empresas ofrezcan a los clientes una forma sencilla de cancelar, tan sencilla y cómoda, de hecho, como el mecanismo para registrarse. Además de una línea telefónica gratuita, las empresas tendrán que ofrecer una opción en línea que permita a los clientes cancelar haciendo clic en un enlace o enviando un correo electrónico preformateado.
Además de eso, la ley requiere que las empresas envíen a los suscriptores un recordatorio anual sobre el costo de la suscripción y cómo cancelarla, así como un aviso previo de los cambios en el precio.
«California tiene ahora la ley más completa del país» sobre servicios de suscripción, dijo Herrell en un comunicado el martes. «Desde membresías de gimnasios hasta suscripciones de software y clubes de vino, los consumidores deberían tener el control de sus suscripciones y no soportar más tácticas dilatorias interminables para quedarse con su dinero».
Mientras los legisladores de California elaboraban sus propias protecciones para los consumidores, la Comisión Federal de Comercio ha estado tomando medidas enérgicas a nivel nacional contra las empresas acusadas de inscribir a personas en suscripciones sin su consentimiento y dificultarles la cancelación. Desde marzo de 2023, también ha estado trabajando en una norma de «Click to Cancel» que cubre el mismo terreno que la AB 2863.
En un correo electrónico, Herrell dijo que era importante que el estado siguiera adelante, independientemente de las acciones de la FTC. En los últimos años, los opositores a las normas federales han presentado demandas ante juristas federales conservadores para que se desestimen las normas, dijo. La medida del estado «garantiza que si (o más bien cuándo) eso sucede, los consumidores de California tengan fuertes protecciones para ‘hacer clic para cancelar’ o ‘llamar para cancelar'», dijo Herrell.
E incluso si la agencia adopta una norma que sobreviva a los desafíos, establecerá un piso para las protecciones estatales, no un techo, dijo, y agregó que la AB 2863 es al menos tan fuerte como lo que la FTC ha propuesto en su procedimiento «Click to Cancel».
