Según un nuevo informe, los inversores no se enfrentan a demasiadas dificultades para detectar los rug-pull de criptomonedas, ya que la mayoría de estas estafas suelen tener rasgos distintivos y visibles.
La auditora de seguridad blockchain Hacken publicó su último informe sobre seguridad el 25 de octubre, con el objetivo de detectar las tendencias en los hackeos de criptomonedas del tercer trimestre y evaluar cómo abordaban la seguridad los proyectos afectados.
El informe prestó especial atención a los «rug pulls», que son un tipo de estafa de salida que se make cuando un equipo bombea el token de su proyecto antes del retiro repentino de liquidez. Según Hacken, los «rug pulls» de criptomonedas constituyeron la mayor cantidad de exploits en criptomonedas, representando más del 65% de todos los hackeos en el tercer trimestre de 2023.
La razón por la que hay tantos rug-pull en el mercado es que es fácil crear tales esquemas. «Los estafadores en serie utilizan fábricas de tokens que muestran el mismo comportamiento para producir tokens fraudulentos a escala masiva», señala el informe.
A pesar de su alta prevalencia, los rug-pull de criptomonedas son «una de las estafas más sencillas de prevenir», afirma Hacken, que proporciona algunos consejos sobre este tipo de estafas basándose en sus observaciones del tercer trimestre.
Según Hacken, una de las formas más importantes de evaluar un proyecto es comprobar si ha sido auditado por un tercero independiente. De los 78 proyectos de criptomonedas del tercer trimestre examinados por Hacken, sólo 12 informaron haber completado «algún tipo de auditoría».
Pero incluso cuando un criptoproyecto proporciona una auditoría, los usuarios deben estar atentos para comprobarlas adecuadamente, ya que una auditoría por sí sola no siempre garantiza la protección contra las estafas, señaló Hacken, declarando:
“El proyecto puede someterse a una auditoría y tener un informe de auditoría, pero con una mala puntuación. Sin embargo, los usuarios lo pasan por alto y consideran suficiente el mero hecho de que el proyecto haya sido auditado.”
Según la cofundadora y CEO de Hacken, Dyma Budorin, los inversores suelen ignorar señales de alarma como la ausencia de auditorías y otros problemas debido a factores como el miedo a perderse algo (o FOMO). La industria ha visto historias de éxito con memecoins como Pepe (PEPE) y Shiba Inu (SHIB), donde 100 dólares por curiosidad llevaron a ganancias significativas, por lo que la gente tiende a esperar que esta historia se repita, señaló la ejecutiva.
«Este deseo de obtener ganancias sustanciales en un corto período de tiempo a menudo hace que las personas pasen por alto las señales de alarma y se adentren impulsivamente en las inversiones», dijo Budorin, y agregó:
“Los estafadores son muy conscientes de esto, y son muy buenos imitando proyectos exitosos. […] Los estafadores se refieren con frecuencia a proyectos prósperos, intensificando el FOMO sobre la próxima gran oportunidad.”
La CEO de Hacken también subrayó que el proceso de invertir en criptomonedas es una «obviedad para muchos usuarios», que requiere «sólo unos pocos clics». Según la ejecutiva, este hecho también puede llevar a una toma de decisiones impulsiva.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Noticias Blockchain. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión
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