Media docena de asesores de fusiones y capitalistas de riesgo entrevistados por Bloomberg News después de la contundente victoria de Trump dijeron que esperan un fuerte repunte de la actividad el próximo año. Citaron expectativas de que Trump cumpla su promesa de destituir al presidente de la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU., Gary Gensler, quien ha liderado una ofensiva de años contra la industria, así como de una legislación más favorable.
Un aumento postelectoral en los precios de las criptomonedas proporcionó un primer indicio de que el récord de 135 millones de dólares que la industria canalizó en las elecciones políticas estadounidenses de este año a lo largo de las elecciones podría dar sus frutos. Ahora, muchos directores ejecutivos envalentonados por esa reacción probablemente recurran a adquisiciones para acelerar los planes de expansión, según banqueros de inversión centrados en activos digitales.
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«Con Trump en la Casa Blanca, esperamos que 2025 sea un año mucho más sólido para la negociación», dijo Casper Johansen, quien dirige el negocio de asesoría sobre activos digitales de The Spartan Group.Los ejecutivos de criptomonedas han achacado durante mucho tiempo la escasez de fusiones y adquisiciones -incluso cuando los precios de los activos experimentaron una reactivación de dos años- a la incertidumbre en torno a las regulaciones estadounidenses. Otros centros financieros, desde Singapur hasta Dubai, ya han establecido regímenes regulatorios criptográficos, y el marco de Mercados de Criptoactivos de la Unión Europea entrará en pleno vigor a finales de 2024.
Eso dejó a Estados Unidos como el último mercado importante sin un conjunto integral de regulaciones para las criptomonedas, lo que avivó la percepción de lo que la industria ha llegado a ridiculizar como «regulación mediante la aplicación de la ley».
La victoria de Trump aliviará los persistentes temores de la alta dirección de que se bloqueen acuerdos, se declaren líneas de negocios ilegales y se tomen medidas legales por parte de la SEC, según Haseeb Qureshi, socio gerente de Dragonfly Capital. «A fin de cuentas, espero que los próximos cuatro años sean mucho más favorables que los últimos cuatro», afirmó.
No es nada seguro que la flexibilización de las regulaciones desate una bonanza en materia de fusiones y adquisiciones. Un posible obstáculo para un repunte de los acuerdos es que la mayoría de las empresas de criptomonedas siguen estando estrechamente participadas, lo que significa que si pagan en acciones, las negociaciones sobre valoraciones pueden volverse complicadas. Muchos posibles compradores recaudaron dinero por última vez durante el mercado alcista que terminó en 2022, con valoraciones mucho más altas que las que prevalecen en la actualidad.
El desajuste resultante entre las expectativas de compradores y vendedores «es donde hemos visto muchos de estos acuerdos potenciales morir durante las negociaciones», dijo Rob Hadick, socio general de Dragonfly.
Pero los compradores externos a las criptomonedas también están dando vueltas, y algunos de ellos poseen recursos mucho mayores.
Stripe Inc., la empresa de tecnología financiera valorada en 70 mil millones de dólares en una ronda de financiación de julio, dijo el mes pasado que planea comprar la startup de moneda estable Bridge. Stripe pagará 1.100 millones de dólares, dijo en ese momento una persona familiarizada con el asunto. Sería una de las mayores adquisiciones jamás realizadas por una empresa de activos digitales.
El acuerdo también se destaca por las ganancias inesperadas que generó a los patrocinadores de Bridge, incluido Sequoia Capital. La participación de la firma de capital de riesgo con sede en Menlo Park, California, ahora está valorada en más de 100 millones de dólares, cinco veces más de lo que pagó Sequoia cuando invirtió en Bridge apenas unos meses antes, informó Bloomberg News el 28 de octubre.
«La esperanza es que este sea el momento desencadenante para que otras empresas tecnológicas también pasen a la ofensiva», dijo Chris Ahn, socio de Haun Ventures, que también participó en la ronda Serie A de Bridge y posee una participación de aproximadamente el 4%. No hizo comentarios sobre el valor actual de la participación.
Trump, un antiguo criptoescéptico conquistado después de un esfuerzo masivo de cabildeo, hizo campaña con promesas de almacenar el token original para una reserva nacional y asegurarse de que todo el Bitcoin restante sea «fabricado en los EE. UU.». Su mensaje resonó en una cohorte pequeña pero financieramente influyente que quedó amargada por lo que describen como un trato injusto tras la implosión de FTX hace dos años.
Entre las empresas de criptomonedas que ya han mostrado apetito por adquisiciones se encuentran la corredora FalconX y el operador de monedas estables Tether Holdings Ltd. Tether, que generó una ganancia no auditada de 2.500 millones de dólares en el tercer trimestre a partir de sus enormes reservas, dijo en junio que esperaba invertir más de mil millones de dólares en acuerdos en los próximos 12 meses.
«El calor en el espacio ha aumentado dramáticamente en las últimas 24 horas», dijo el jueves Steve McLaughlin, director ejecutivo del banco de inversión centrado en criptomonedas FT Partners.